Este antiguo peine de marfil revela el deseo de estar libre de piojos
Grabado en el costado de un peine de marfil de casi 4000 años de antigüedad hay un simple deseo: ¡Quítenme estos piojos del cabello!
Esta débil talla representa el ejemplo más antiguo conocido de una oración completa escrita con un alfabeto fonético. Este tipo de sistema de escritura utiliza letras o símbolos para representar sonidos. Más tarde sirvió como base principal para muchos alfabetos modernos.
Eso convierte al peine en “el objeto más importante que he encontrado durante una excavación”, dice Yosef Garfinkel. Es arqueólogo de la Universidad Hebrea de Jerusalén en Israel. Garfinkel formó parte de un equipo que publicó sus hallazgos el 9 de noviembre en la Revista de arqueología de Jerusalén.
La talla fue escrita en el idioma primitivo de los cananeos. Este grupo cultural vivió en la región del Mediterráneo oriental llamada Levante hasta hace unos 2.000 años. Estas personas comerciaron ampliamente en todo el Mediterráneo. Pocos de sus registros escritos han sobrevivido. La mayor parte de lo que los investigadores saben sobre ellos proviene de documentos, como la Biblia hebrea y el Antiguo Testamento.
El peine fue desenterrado en 2016. Apareció entre las ruinas de la antigua ciudad de Lachish, en el actual Israel. Años más tarde, el peine fue enviado a un laboratorio para buscar rastros de piojos. En el laboratorio, alguien notó símbolos tenues grabados en un lado. Una mirada más cercana reveló que los símbolos deletreaban una oración: «Que este colmillo elimine los piojos del cabello y la barba».
El descubrimiento puede ofrecer un vistazo a la vida de uno de los residentes adinerados de Lachish. El hecho de que la oración se refiera a una barba sugiere que pertenecía a un hombre, dice Garfinkel. El material del peine da más pistas. El marfil de elefante tuvo que ser importado de Egipto. Así que habría sido caro en ese entonces.
El alegato contra los piojos es “muy humano”, dice Garfinkel. Señala que otros escritos de la época tienden a centrarse no en la higiene personal sino en cosas como las victorias reales o la religión. También parece que el peine pudo cumplir su propósito. Entre sus dientes, los investigadores encontraron los restos antiguos de un piojo.