El aumento del nivel del mar está acelerando la erosión a lo largo de la costa de Senegal
La retirada costera en África occidental es un problema apremiante. El contacto entre la tierra y el mar en las costas produce intensos procesos de erosión y sedimentación. Cuando la erosión es más intensa que los depósitos de tierra y arena, el mar avanza y la línea de costa retrocede. Esto puede ser causado por tormentas intensas, obras costeras, extracción de arena o el aumento del nivel del mar.
Naciones Unidas ha destacado recientemente los impactos asociados con la extracción de arena, un problema con muchas consecuencias ambientales y sociales.
Senegal proporciona un ejemplo de erosión costera. Entre 1954 y 2002, el litoral del país retrocedió en promedio 2,2 metros por año, llegando a tres metros por año entre 2014 y 2018. Este retroceso costero está destruyendo casas, edificios turísticos e infraestructura pesquera, y provocando la desaparición de playas y la pérdida de tierras agrícolas.
El avance del mar también está haciendo que las aguas subterráneas sean más salinas e inadecuadas para el consumo humano y la agricultura. En las zonas estuarinas, un aumento de la salinidad afecta a los manglares y la pesca.
Es importante saber qué está causando este retroceso costero para poder asignar responsabilidades para enfrentarlo. Hay dos dimensiones, una local y otra global.
A nivel local, algunas acciones humanas pueden conducir a la erosión costera y la desaparición de playas. La construcción de rompeolas, a menudo en respuesta a la erosión, altera la forma en que el mar normalmente mueve la arena de un lugar a otro. Aunque los rompeolas resuelven problemas locales, pueden crear otros nuevos: el depósito de arena en un área se produce a costa de la erosión en otra.
Otro problema en África occidental es la extracción ilegal de arena costera, principalmente para la construcción. La arena tiene demanda y las playas son una fuente fácil de suministro.
A nivel global, esta región está muy afectada por el cambio climático. El aumento del nivel del mar es cada vez más pronunciado. Uno de los impactos es un aumento de la erosión costera, que afecta a la agricultura, la pesca y el turismo.
En un estudio reciente, nuestro objetivo fue evaluar el retroceso de la línea de costa en una sección de 13 km de la costa de Senegal, en la península de Palmarin. Buscábamos tendencias a lo largo del tiempo y causas.
El estudio mostró un retroceso cada vez mayor de la costa a lo largo de decenas de kilómetros, sin que la acción humana local lo justifique. La principal causa es el cambio climático. Es probable que haya impactos significativos para el medio ambiente, la población y las actividades económicas. Existe una necesidad urgente de desarrollar un plan de adaptación para esta área.
Palmarín, una historia clásica del cambio climático
Elegimos estudiar el área de Palmarín porque es altamente vulnerable a la erosión costera, las inundaciones y la salinización del suelo. El retiro de la costa ya es intenso. Estudios anteriores mostraron tasas de retroceso de la costa de 1,20 m/año en 1982 y 2,20 m/año en 1954–2002.
Analizamos el período 2005-2018 y comparamos nuestros resultados con estimaciones y mediciones anteriores. Utilizamos como indicador de retroceso de la línea de costa el frente de erosión marina. Esta es la pequeña escarpa entre la playa y el interior, fácilmente reconocible en fotografías aéreas. Encontramos un aumento del retroceso a 2,45 m/año en 2005–2010, 2,60 m/año en 2010–2014 y 3,05 m/año en 2014–2018.
También evaluamos el riesgo de retroceso de la costa en el futuro a corto y mediano plazo.
Nuestras estimaciones a corto plazo mostraron daños probables en pueblos, campamentos turísticos y carreteras. También existe un riesgo importante de que la erosión costera conecte el mar y las zonas lodosas intermareales del estuario del Saloum. Esto dividiría la península en varias islas, cambiando la forma en que evoluciona la erosión, produciendo una disminución de los manglares y amenazando así la pesca. Los manglares son importantes áreas de desove, por lo que la erosión afecta la pesca, un recurso económico fundamental para la población local.
En la zona de estudio no existen actualmente defensas costeras ni zonas de extracción de arena. Por lo tanto, la erosión costera no puede atribuirse a la acción humana. Por otro lado, el aumento del nivel del mar es indiscutible y explica lo que está sucediendo.
Una responsabilidad mundial
Los camiones que retiran arena de una playa crean una imagen amigable para los medios, mientras que un aumento gradual en el nivel del mar de unos pocos milímetros cada año es mucho más sutil. Sin embargo, sus efectos son devastadores. El avance del mar en las costas de África occidental puede afectar a cientos de miles de personas.
Se necesita acción tanto a nivel global como local para mitigar los efectos del retroceso costero.
A nivel local, se deben evitar obras que alteren la dinámica costera y se debe controlar la extracción de arena costera. Muchos países ya lo hacen. En Senegal, el código de minería prohíbe la extracción de arena de mar, la gendarmería combate la minería ilegal y el gobierno realiza estudios para encontrar alternativas a la arena de mar.
Pero estas medidas, que pueden solucionar problemas locales, no detendrán el actual retroceso costero. Una acción global fuerte por parte de todos los países es esencial para mitigar el cambio climático al reducir drásticamente las emisiones de gases de efecto invernadero.
Las medidas de adaptación local también son necesarias para garantizar el futuro de la región y sus habitantes. Las defensas costeras son caras y no impiden que las playas desaparezcan. En muchos lugares, será necesario considerar alejar a la población de la línea de costa para permitir la formación de nuevas playas. Hacerlo requerirá grandes inversiones y ocupaciones de tierras, y puede afectar la agricultura y la biodiversidad.
El cambio climático es un proceso global, pero las responsabilidades de cada país son diferentes. Por lo tanto, la adaptación a sus efectos también debe ser global, y su financiamiento debe ser proporcional a esas responsabilidades.
Los países de África Occidental deben evitar las causas locales del retroceso costero. Pero, sobre todo, deben contar con el apoyo internacional para adaptarse a los problemas sociales, ambientales y económicos derivados del cambio climático, un problema global del que difícilmente son responsables.